La familia y la utilización del ideal de belleza 2
No solo crecemos creyendo que la violencia que recibimos es “normal” sino que además se nos inhibe de cualquier posibilidad de ponerle límites, porque nos enseñan a nunca responder, incomodar, siempre anteponer los intereses de todos antes que los nuestros, ser amables, ser buenas, ser sumisas como modelo de lo que es ser “buenas y verdaderas mujeres”
Necesitamos salir de ese silencio, sumisión, incomodidad aprendiendo entre nosotras, poniendo en común, convirtiendo en herramienta colectiva lo personal. Estos y otros cientos de testimonios surgen frente a la pregunta de si alguna vez pudiste poner límite a los comentarios, juicios, humillaciones y cómo lo hiciste, para que todas podamos aprender de todas.
Necesitamos hackear algunas ideas que nos limitan:
Muchas veces creemos que poner límites es explicar lo que sentimos o argumentar nuestras ideas. No hermana, eso es explicar y educar, no poner un límite. El que te violenta una y otra vez no quiere entender, quiere humillar y se alimenta de tu explicación.
Otras veces no ponemos límites porque nos parece que nos falta llegar al momento ideal en el que estemos tranquilas y se nos ocurran las mejores cosas para decir, las más adecuadas y que provoquen el efecto correcto. Ese momento en general no existe.
A todas se nos acelera el corazón, se nos seca la boca y nos brotan las lágrimas. No importa como lo hagamos, importa hacerlo y practicar para encontrar la forma que mejor nos calce, cada una a su manera, no hay manuales ni fórmulas que nos sirvan a todas. Después de tanto silencio tenemos derecho a decir como nos salga.
Obvio que nos van a decir locas, intensas, feminazis exageradas, malco*idas, sensibles y bla bla bla, porque la idea es que nos quedemos calladas. No pasa nada.
Obvio que también dirán “era un chiste”: pues si no me causa gracia no es un chiste.
Obvio que dirán: “a vos no se te puede decir nada” y no, no se me puede decir nada. Sigamos aprendiendo por acá: Las que pusieron límites que funcionaron: ¿Cómo lo hicieron? ¿Nos cuentan?
#HermanaSoltaLaPanza #HermanaNoExpliquesMas
