Compartimos este video sobre este tema
Estos días nos llega este texto de Nadel, que tiene 16 años, sus reflexiones sobre las lógicas de las fiestas de egresados. Mercantilización, hegemonía, invisibilización de la diversidad, verguenza, sexualización y cosificación.
Les compartimos parte de su texto y les leemos.
“Tengo 16 años y con mis compañeros estamos armando nuestra fiesta de egresados. Un año antes y ya estamos ocupándonos del disfraz que nos vamos a poner: que si una se hace un remerón, que si otra se hace corpiño y bombacha, que si con lentejuelas blancas o negras, si más corto o más largo (aunque dale! Ya sabemos que el más corto siempre termina ganando), con esta o la otra modista. No pueden congelar los precios para el año próximo, pero el valor de ahora ya es una locura.
Cada camada de egresados crea una cuenta de Instagram con el nombre del colegio y la fecha. Por ejemplo, 16DTalColegio. Se elige una foto de perfil –que supuestamente debería representarnos a todos-, sin embargo muchas veces la imagen es un par de tetas o un culo en primer plano, para atraer más la atención y convocar más gente que se sume al perfil y a la fiesta, con slogans asquerosos que ni siquiera quiero citar.
Existe algo llamado “Wanted”, por el cual todas las camadas suben a sus cuentas de Instagram una lista con nombres de compañeros a los que se considera que están lo suficientemente buenos como para querer “darle”.
También existe un perfil de otra red social, en la que se hacen preguntas anónimas y los egresados se ocupan de contestarlas y subirlas a la historia de la cuenta de cada camada, y en la cual aparecen los nombres de los que ellos consideran que no están para “darles”.
La mayoría de la gente de mi edad minimiza, naturaliza todo esto (hay que hacerlo porque es así, porque es lo que se acostumbra, es lo “normal”… la fiesta de egresados es así; la vida es otra cosa). Lo separa de temas como el feminismo, el #niunamenos, la cosificación de la mujer, el miedo que tenemos las mujeres de salir a la calle, los desórdenes alimenticios, etc.
Yo creo que todo se relaciona”
Nosotras también.
Lo voy a usar con mis alumnxs de tutoría de segundo y tercer año en el Pelle
Qué genia esta chica! Qué mirada crítica y lúcida… A los 16, cuando lo normal.es ceder a la presión de sus pares y lo que «todos hacen»… Ojalá su testimonio despierte a otros/as
Había escuchado críticas de esta situación, pero nunca dichas por una adolescente que lo está viviendo.